El pasado jueves por la tarde, el Parque de Bomberos Baix Maestrat tuvo que movilizarse hasta Peñíscola, para sofocar un nuevo incendio de vegetación en el término municipal.

Al área afectada, entre las urbanizaciones Peñisol y Atalayas, se desplazaron inicialmente dos dotaciones de bomberos, dos unidades de Bomberos Forestales y dos helicópteros y dos aviones SAT.

La rápida actuación de los cuerpos de emergencias logró que este incidente, que se originó en una zona de cultivos abandonados, se diera por controlado a las 20:45 horas.

También ayudó, indican las autoridades, el buen mantenimiento de los hidrantes de la urbanización, lo que permitió a los bomberos repostar con mayor rapidez.

Pese a ello, al menos dos personas tuvieron que ser atendidas por inhalación de humo y evacuadas junto a un centenar de personas de más de 25 viviendas próximas al incendio.

Las casas no resultaron afectadas directamente, pero esta medida se tomó por precaución. Tras el recuendo de daños, se determinó que únicamente la puerta de un patio quedó dañada por el fuego.

Durante la noche se ha seguido trabajando en el área para refrescarla y vigilarla de cerca para evitar posibles rebrotes.

La Guardia Civil y la Policía Local de Peñíscola también han trabajado de forma coordinada con los bomberos. Hace escasas semanas otro incendió afectó  a esta misma población.

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